En tiempo de sequía, el aprovechamiento del agua es de suma importancia. Dada esta situación, el Ministerio de Agricultura de Chile a través de la Comisión Nacional de Riego (CNR) y el Instituto de Investigación Agropecuaria (INIA), han desarrollado en varias regiones del país un sistema para la recolección de aguas lluvias.

Lo que se persigue con este sistema es utilizar el agua que precipita. “En vez de que caiga en los techos, se hace que pueda ser conducida y almacenada a una cisterna”.

Para conseguirlo, se instalan tuberías que conducen el agua que cae de los techos y que se pueda almacenar en una cisterna (o “guateros”), que en este caso son de 10 mil litros.

Cada milímetro de agua caída, representa un litro por metro cuadrado. “Si tengo un techo de 40m² y me caen 5 mm, tendría 200 litros de agua. De esos 200 litros se estima un 20% de pérdidas por salpicadura, por ejemplo”, explicó Villarroel y agregó que este sistema está orientado para el uso en invernaderos.

“El objetivo principal es que si tenemos un recurso que está siendo cada vez más deficiente pero contamos con precipitaciones, en vez de que esa agua se pierda, la idea es recolectarla para tiempos de sequía”.

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Fotografía: www.portalfruticola.com